Bueeno, menudo año llevamos. Complicadito, complicadito. Tener un hijo es una experiencia que te cambia la vida.... tener dos, ni os cuento. En fin, el tiempo, ya de por sí escaso pasa a ser valioso como un diamante y algunos ratos que destinaba a este blog se han destinado ahora a cambiar pañales y dar biberones -casi- a dos manos.
Con todo me he permitido cambiar la plantilla, esta es más "pre-configurada" pero da menos problemas que el engendro que yo había pergeñado....
Y a todo esto me había prometido hablar de los vinos sin alma.... Pero no doy más de mí.... A ver si mañana puedo escribir algo al respecto.
Saludos.
viernes, abril 13, 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario